Disponerse a cambiar.
El autoanálisis es el medio por el cual introducimos la nueva visión, la acción, y la gracia para iluminar el lado oscuro y negativo de nuestra naturaleza.
Quiero compartirles la reflexión que me deja el haber impartido junto con el Dr. Eduardo Calixto y la Mtra. Julia Inés Calzada el Taller de Pareja que Escuela de la Vida abrió al público este pasado fin de semana.
Primero agradezco a todos los talleristas que dispusieron sus mentes y sus corazones para vivir una experiencia que ha dejado una nueva visión en la consciencia de todos lo que participamos en él. Introduciendo aprendizajes y herramientas para relacionarnos de una manera más sana con nosotros mismos y con los demás para así formar una vida más plena y satisfactoria.Si no han vivido aun esta experiencia, los aliento, sinceramente a permitirse esta experiencia, que sin duda no pasará como una más.
“Ningún hombre es una isla, algo completo en sí mismo; todo hombre es un fragmento del continente, una parte de un conjunto.”
-John Donne
No es fácil reconocer lo que nos duele, nuestros errores, lo que estamos haciendo de manera equívoca en nuestras vidas. Especialmente en nuestra relación más cercana como adultos: la de pareja. Todos venimos de contextos distintos, de familias con una historia, la que muchas veces nos ha dejado heridas que no hemos podido sanar. Es sólo hasta que lo reconozcamos y pongamos frente a nosotros mismos el panorama completo, que nos llega el desarrollo de esa clase de humildad que hace posible recibir la ayuda y hacer un verdadero cambio.
Felicito a todos los que durante este taller se dieron la posibilidad de abrir ante sí mismos y ante los demás esas huellas que han marcado sus vidas y la posibilidad a una nueva dimensión para encontrar las claves que les impiden tener una relación de crecimiento y de amor. Los invito a que juntos difundamos más este taller, este trabajo de equipo tan satisfactorio para todos los que en él participamos.
No somos culpables de nuestra historia pero si responsables de construir de hoy en adelante un sendero por que gocemos de caminar. De acercarnos, poco a poco y con un esfuerzo continuo, hacia nuestros anhelos más profundos. Para cumplir nuestra meta más esencial: la felicidad.
Con amor y gratitud,
Vivian Toussieh.
